Samstag, 31. Oktober 2009

Renovación estética del blog

Hola a todos malditos frotaingles ladillosos. Hoy os presento en primicia mundial la nueva imagen de Las ardillas siempre van al cielo. Como podréis observar ha sido un cambio completamente positivo, del cual estoy definitivamente satisfecho y orgulloso. Tras 1 semana de estudios estéticos, mediciones lecto-visuales (realizados por la prestigiosa firma Kevin Spacey & Bacon) y rigurosos castings de entre más de 980 trillones de plantillas, finalmente he escogido esta última debido a su adecuación perfecta a los 3 criterios que a continuación voy a detallar:

1. Diseño simple y sencillo, condición imprescindible del divino y omnipotente redactor de este repugnante blog.

2. Texto oscuro sobre fondo claro, según me han solicitado ciertos fans epilépticos y/o consumidores ocasionales de sustancias alucinógenas, que dicen ver "puntitos negros cuando terminan de leer".

3. Colores sombríos y apagados, debido a que obviamente un blog que habla de seres monstruosos y aberrantes no pega con tonalidades pastel ni mariconadas por el estilo.

Muy bien, entre las novedades que he incluido están una fotillo que me he sacado de la manga y que no tiene nada que ver con nada, y una mejora importantísima para el futuro desarrollo del blog: LOS COMENTARIOS. Algunos fans me han hecho saber que, aunque tenían terribles ganas de publicar un comentario, no eran capaces de hacerlo. Al principio les taché de inútiles psíquicos, seres ineptos o imposibilitados mentales (con un nivel de inteligencia similar a La Delineante), pero finalmente me he dado cuenta del porqué, de modo que he modificado el funcionamiento de los comentarios haciéndolo mucho más simple y dinámico. Incluso he agregado unas intrucciones muy precisas para un impecable posteado, de modo que ahora mis queridos lectores si seguís sin escribir nada será porque verdaderamente sois unos RETARDADOS.

Recuerdo que aún está abierto el plazo para realizar preguntas absurdas acerca de los Uruk-Ñú, el último eslabón de la mitología contemporánea, es decir (para que me entiendan los RETARDADOS), aún existente en nuestros tiempos. Pero no perdáis mucho tiempo, porque igual mañana se me pira la pinza y no acepto más preguntas, de modo que os quedaríais con las ganas de saber por ejemplo "¿Cómo se aparean los Uruk-Ñú?"... Dios santísimo, no puedo ni imaginármelo... ¡¡¡Las futuras entradas serán dantescas!!! Stay tuned, Servus.

Samstag, 24. Oktober 2009

Turno de preguntas acerca de "Mi gran amiga La Delineante"

Hola a todos malditos mascapenes flácidos. ¿Cómo están ustedes? Imagino que mejor que yo, sin nada mejor que hacer que estar leyendo este rancio y putrefacto blog. Os doy la enhorabuena, dado que gracias a vosotros la página ya ha superado el millar de visitas. Para mí es un motivo de satisfacción que tanta gente lea las sandeces inconexas que escribo. Sin embargo, esto a su vez hace que me pregunte a mí mismo: ¿por qué me leéis?

Esta maravillosa pregunta me la hice un día cuando estaba evacuando analmente materia residual en el cuarto del inodoro. Así, mientras los vapores fétidos inundaban el aseo, llegué a ciertas conclusiones que logré escribir en un papiro, pero lamentablemente lo usé para limpiarme la pandereta, de modo que esas mismas conclusiones disfrutaron del Aquopolis con mi materia residual.

Muy bien, el párrafo anterior ha sido un claro ejemplo de texto con información cero que os he metido doblada. Ahora ya podemos hablar de temas más coherentes. Como por ejemplo, ¿por qué ha tardado Ultra-Yan tanto en meter de nuevo una entrada? Pues, como ya expuse en mi anterior post, mi trabajo me está destruyendo y no consigo aunar fuerzas suficientes para actualizar mi blog. Los meses venideros se vaticinan fatigantes y mi estado anímico está a unos niveles preocupantes. Esto se ve agravado a su vez por el pésimo estado meteorológico del que disfrutamos aquí. La temperatura ambiental es óptima para los pingüinos patagónicos y cada día lucho contra viento y marea para no quedar criogenizado en medio de la calle y despertarme de repente en el año 83392 de la futura 5ª era del Praseodimio.

Por cierto, muchas gracias a todos por los infinitos comentarios que estáis escribiendo. Cada día recibo centenares de ellos, tantos que no me da tiempo a leer ninguno y en un acto impulsivo los borro todos de golpe porque me agobio. Vamos, que muchísimas gracias a todos, os agradezco vuestra enorme colaboración. Pero por encima de los 16 billones de comentarios (tantos que colapsaron durante 3 días blogger.com) he de resaltar uno, posteado por el grandioso y genuino Sr. Fray, una persona que dedicó 34 segundos de su vida en escribir un pequeño párrafo y que se jugó el pellejo mientras lo hacía. Has sido tremendamente valiente querido compañero.

Bien, después de esta sarta de absurdeces (como ya va siendo habitual) vamos a explicar un poco el motivo de esta entrada: Dado el increíble y apoteósico éxito del relato Mi gran amiga La Delineante (tanto que si escribís en Google "uruk-ñú" saldrá este blog como primer resultado) he decidido dar el turno a los lectores más curiosos. Para ello, voy a publicar un e-mail donde podréis mandar todas las preguntas que se os ocurran acerca de los Uruk-Ñú. Cualquier cosa es válida y será por supuesto contestada en el siguiente post. Repito CUALQUIER COSA por muy absurda que sea lo contestaré, me da igual lo que preguntéis. Como es de esperar, no me va a escribir ni Peter Petrelli, porque sois todos unos malditos LAMEFAROLAS. Pero luego que nadie se queje de que no se le dio la oportunidad para saber TODOS LOS ENTRESIJOS de este increíble y a la vez repugnante relato. Ahí va el e-mail:

diofantika@yahoo.es

Da igual si sois amigos míos o no lo sois, si me conocéis personalmente o sólo de oídas, o directamente no me conocéis de nada y os habéis topado con este blog de casualidad. Simplemente preguntad, sed curiosos, convertíos en freaks de los Uruk-Ñú, haceros camisetas, buscad un diccionario español-urukñuíno y mantened conversaciones banales e inconexas entre vosotros. Yo os animo a hacerlo y a cambio os brindaré horas de entretenimiento con las respuestas. Tenéis de plazo lo que me salga del miembro. Ahí queda dicho. Os deseo a todos una feliz semana. Servus.

Samstag, 10. Oktober 2009

Mi gran amiga La Delineante (parte 7 y fin de la 1ª temporada)

Hola malditos hijos de la gran Perry. Hoy vuelvo a la carga repleto de energía pseudo-negativa para plasmarlo textualmente en este apestoso y repugnante blog. La frecuencia de escritura se ha visto mermada debido al incremento de presión laboral ejercida desde mi curro y por ello cada vez que llego a casa lo último que me apetece es ponerme a darle a las teclitas. En el curro estoy todo el santo día con el ordenador y acabo hasta el mismísimo falo. Sin embargo soy una persona generosa y, a pesar de que no me apetece una mierda escribir y lo único que me satisface ahora mismo es rascarme el testículo izquierdo, aquí estoy dando el callo por vosotros malditos lamefarolas sin honor, que lo único que os interesa es vuestro propio placer a base de leer las estupideces que escribo, y no movéis ni un solo dedo para escribir por ejemplo un PUTO COMENTARIO. Ahí queda dicho.

Llegado a este punto habréis notado ya ciertos cambios en mi estado de humor. Es cierto, las cosas ya no molan tanto como antes y mis pelotas poseen un radio comparable al de la órbita solar del planeta Urano. Llueve, hace viento, frío, estoy enfermo con ultra-tos y no paro de currar como un auténtico hijo de Perry Mason. Todos estos factores están reconvirtiendo mi ADN transformando mi ser al Ultra-Yan agrio y belicoso de antaño. Si lo estabais echando de menos, estáis de enhorabuena. Si preferíais al Ultra-Yan armonioso de los últimos tiempos, entonces os tendréis que joder.

De todas formas debéis de sentiros agradecidos ya que esto significa un gran empujón al relato Mi gran amiga La Delineante. No escatimaré en agravios e injurias hacia su persona, e incluso incrementaré mi prosa literaria de forma tan despiadada que destruirá vuestras mentes al no poder soportar tantas ofensas concentradas en tan pocos párrafos. Seguimos con el relato, concentrad vuestras fuerzas porque esto comienza ahora:

El trabajo estaba convirtiéndose en una pesadilla. Todos los días tenía a esta criatura satánica delante de mis narices y sus constantes gilipolleces no hacían más que alimentar mi profundo odio hacia su persona. Si ya su aspecto físico era capaz de provocar el suicidio entero de 40 escuadrones SWAT, su comportamiento no hacía más que acrecentar la delineante-fobia que estaba padeciendo la empresa. Cada vez que alguien se acercaba a preguntarle a La Delineante (alias "aberración de la naturaleza") algo acerca de algún proyecto, nunca era capaz de responderle de forma simple y certera. Simplemente se liaba a ladrar mierda, a soltar auténtica basura por el hocico, frases con información cero, sin ningún sentido y que no aportaban nada al desarrollo del proyecto. ¿Y qué significa esto? Que aparte de no ayudar, estaba haciendo perder el tiempo al interlocutor dado que escuchar mierda nunca ha sido positivo para la eficiencia laboral. Un claro ejemplo demostrativo podría ser el típico momento en el mercado cuando a las ancianas les llega el turno para pedir (ya sea en la pescadería, carnicería o frutería), que se lían a soltar frases banales y carentes de información para, tras 15 minutos de conversación estúpida, por fin pedir sus 150 g de clementinas. Ese momento suele ser bastante devastador para el que espera detrás debido a la enorme pérdida de tiempo que supone. Creo que es un símil bastante coherente, lo único que en el caso de La Delineante hay que agregar todavía el enorme estómago que hay que tener para prestar atención a un auténtico feto subdesarrollado y malformado, dado que el solo hecho de verla de reojo provoca arcadas de bilis y horrendas pesadillas durante semanas.

Los días iban pasando y un día como otro cualquiera, mi compañero de trabajo cometió uno de los mayores errores de su vida (y también de nuestras vidas). El coleguita, que es políticamente super correcto, no se le ocurrió mejor cosa que preguntar al monstruo si quería venirse a comer con nosotros, dado que íbamos juntos casi todos los días a la misma hora. La Uruk-Ñú no se lo pensó y, para mi espanto, vino con nosotros. Osease, voy a explicar lo que supone este hecho en mi vida: si ya tengo que aguantar 8 horas diarias de trato con un esperpento abominable, horrendo y repugnante, ahora había que añadirle otros 45 ó 60 min más, precisamente el tiempo en el cual me desintoxicaba del descomunal asco que recorría mi cuerpo cuando permanecía en la oficina.

No hicieron falta ni 3 minutos para que mi compañero de curro se diera cuenta del gravérrimo fallo que había cometido. La comida fue un monólogo de La Delineante, exponiendo sus estúpidas teorías acerca de todo lo existente y soltando mierda de forma descomunal. Una de sus célebres frases fue: "Me encanta comer, podría estar comiendo todo el día". No podía ser de otra forma y su comentario no me extrañaba en absoluto. Al fin y al cabo el cúmulo de grasa debía de provenir de una fuente, y esa fuente no es más que la ingesta brutal de mierda, y esto último lo voy a explicar a continuación. Al día siguiente cuando nos íbamos a comer de nuevo, mi coleguita aprendió la lección y por supuesto no le dijimos nada al monstruo, simplemente cogimos nuestras chaquetas y exclamamos un gélido "hasta ahora". En ese momento La Delineante nos miró e iba a decirnos algo. Yo me quedé petrificado del horror: no quería comer de nuevo con La Delineante. Sin embargo, en tono desinteresado nos mugió: "bueno que aproveche, yo ya me traje la comida de casa". Pero lo único que veíamos era una tarta de fresas y chocolate gigante en su mesa. Y no pude aguantar la curiosidad y le pregunté: "¿y qué vas a comer?". A lo cual ella con gran asombro nos señaló: "esto, ¿no lo ves?". Y EFECTIVAMENTE estaba señalando la tarta. Tuve que marcharme de inmediato, no podía procesar que una persona hiciera una comida ÍNTEGRA a base de tarta. Esto no hacía más que empeorar la imagen que tenía de la Uruk-Ñú hasta niveles realmente nunca imaginables.

Con el paso de las semanas las cosas iban calmándose. No hablaba apenas con La Delineante y ella apenas conmigo. Mi resistencia a mantener conversaciones superiores a 5 segundos con el engendro estaba funcionando. La frase mágica era "no entiendo nada" y la soltaba siempre que podía, aún cuando SÍ la entendía. Cada vez que iba a comenzar una ristra de mierda, la cortaba con esta mágica oración. Y ella refunfuñaba y cerraba el morro. Era sensacional. Una vez más Ultra-Yan había vencido, me sentía victorioso, era algo muy importante para mi salud mental. Había conseguido sutilmente desviar su poder destructivo y anularlo. Lamentablemente esta técnica no favorecía a todos, dado que la basura verbal uruk-ñuína que a mí no me llegaba era desviada hacia mis compañeros de trabajo, que vieron incrementada su dosis diaria de mierda. Pero es ley de vida, sobrevivir o morir.

Y de repente un día, ocurrió un hecho que iba a marcar definitivamente un nuevo vuelco a la historia. Efectivamente, la batalla no iba a acabarse aún. A sabiendas del gran poder que Ultra-Yan poseía, las tropas Uruk-Nuínas lanzaron una nueva ofensiva, esperando que fuese definitivamente letal. Aquel día me pilló desprevenido, sin tiempo a reaccionar. El jefe entró a nuestro despacho y simplemente nos soltó: "mañana viene una nueva delineante y va a instalarse en este despacho". Yo me quedé estupefacto, dado que no recordaba ninguna entrevista de trabajo realizada en la empresa últimamente ni sospechaba absolutamente nada. Y lo mejor de todo, que trasladaban a un compañero mío que estaba conmigo y con la Uruk-Ñú a otro despacho para él solo, mientras que yo permanecía en mi puesto. Esto significa que a partir de entonces iba a compartir mi despacho no con UNA sino con DOS delineantes.

Esta vez no lo dudé un instante: La nueva delineante iba a ser otro engendro, estaba segurísimo. Dada la extraña política empresarial que sigue la compañía era imposible que contrataran a una delineante normal o, es más, a UN delineante (marco énfasis en UN, es decir, masculino). No habría nada de malo, preferiría mil veces antes a un tio con el que se pueda charlar de forma normal (e incluso pegarse unas juergas cervecívicas) antes que un engendro infernal al cual ni siquiera pudiera mirar durante más de 5 segundos, dado que el vómito que expulsaría sería desproporcionado e inundaría la oficina entera de jugos gástricos mezclado con tropezones e incluso tejidos intestinales debido a la virulencia de la náusea. De todas formas intenté pensar en positivo: al fin y al cabo, era imposible que llegase alguien más repugnante que La Delineante. No podía imaginar una cota más alta en asquerosidad y repelencia. Simplemente era imposible, no podía existir y punto.

Y el día siguiente llegó. Me acuerdo que entré como siempre directo a mi despacho y cuando crucé el arco de mi puerta mi visión fue perturbada a mi derecha por algo de dimensiones jamás imaginables. Era increíble que, a pesar de que estaba enfocando hacia mi mesa, mi campo ocular fue completamente ocupado por algo gigante y descomunal que veía de reojo. Y me giré ya sabiendo que lo que me esperaba no era una Uruk-Ñú normal sino algo más destructivo y poderoso. Y así fue, la imagen que traspasó mi retina estuvo a punto de provocar el estallido de los globos oculares. La cantidad de horror que recorría mi cuerpo comenzó a matar una a una las células que componían mi organismo y mis músculos comenzaron a debilitarse ante la espantosa imagen de la nueva Delineante. Era una Uruk-Ñú digievolucionada en los laboratorios clandestinos de Sauron, modificada genéticamente creando una nueva especie más voraz y destructiva, ideada para el combate a campo abierto y a priori indestructible: era La MEGA-DELINEANTE.

La batalla acaba de comenzar, no sabemos el futuro que deparará a la humanidad. La especie humana está en peligro y corre el riesgo de extinguirse ante esta nueva oleada de seres malignos. Sólo un humano puede evitarlo, y ése es Ultra-Yan. Es con diferencia la misión más comprometedora que jamás se le haya presentado: su fracaso puede significar la destrucción del planeta Tierra. ¿Conseguirá Ultra-Yan protegernos ante esta nueva invasión? ¿Qué es lo que ocurrirá en el futuro? ¿Dominará el planeta esta nueva raza de seres abominables? Todas las incógnitas serán desveladas en la próxima y nueva saga "Mis grandes amigas Las Delineantes: The Revenge of the Uruk-Ñú".

Fin de la 1ª temporada

Muy bien sucios lectores, esto ha sido el fin de la 1ª temporada de Mi gran amiga La Delineante. El relato continuará por supuesto, pero la saga pasará a denominarse de otra manera dadas las importantes novedades acaecidas. No sé cuándo podré comenzar a relatar de nuevo, debido al escaso tiempo del que dispongo últimamente, aparte de que todos estos cambios han ocurrido hace apenas 1 semana, y un buen documentador necesita reunir previamente un poco de información antes de ponerse a escribir. Es por ello por el cual os invito a estar al tanto ya que en cualquier momento puede comenzar esta nueva saga que hará las delicias de los más aficionados. Me despido cordialmente de todos ustedes. Servus.